YO TAMBIEN ME MORI

Hace poco tuve la oportunidad de escuchar una entrevista en YouTube con Andrés Parra y Dante Gabel donde el entrevistado uso esa frase.

Video Link: https://www.youtube.com/watch?v=3Pe3ChDuEVg&t=2335s

Tuve que analizar ese concepto y coincidí con mi vivencia; Después de la pandemia, me tocó enfrentar como tenía que ver la vida en el ahora, como pensar y fabricar un camino nuevo donde mi alma se llenara y como debía actuar pos ese evento.

Busqué ayuda, hice terapia y conseguí un método de reprogramación emocional y conductual, toqué fondo y me toco re crear mi forma de pensar y muchos de los aprendizajes y limitaciones que traía de fábrica y vivencia cotidiana.

Tuve que crearme un nuevo NODGARD y lo más difícil era perdonar lo transitado sin las herramientas que hoy manejo, fue todo un desafío. Me gustó tanto que me certifiqué como terapeuta para ver cómo incluso podía profundizar el tema e incluso ayudar a otros.

Fue un renacer, fue MORIR, enterrarme y volver a nacer, pero con ideas nuevas, con una propuesta de la vida diferente, vaya reto a mis 53 años en esa época. (a la fecha tengo 55 años) 2023.

Ese cambio de piel fue complejo, fue auto retarme a ser mejor NO SOLO PARA LOS DEMAS si no para mí, para mi yo interior.

Todos los días posterior a ese cambio desarrollé un alter ego donde él es mi más duro crítico, un observador que me cuida y me dice en todo momento sin piedad cuando me equivoco y me lleva a retomar mi nueva programación, es una interesante lucha a la que me someto varias veces al día.

Morirme y volver a nacer me hiso entender que podemos y debemos hacer las cosas de forma diferente, mejor para nosotros, para nuestra auto evaluación ¿Cómo sabemos si lo estamos haciendo bien? Fácil, cuando nos sentimos felices, con más frecuencia sonreímos, cuando aceptamos más el entorno, con sus defectos y virtudes sin intentar controlar todo, soltando, pero desde el alma, sabiendo que cada persona al igual que una carrera de caballos corren a su ritmo buscando desesperadamente su meta, su norte, puede que no sea el mío, no tiene por qué serlo, no tenemos que hacer que caminen a nuestro ritmo, dejar incluso que mis propios hijos vivan sus experiencias sin pretender “salvarlos” de lo que hemos fallado nosotros, porque ellos tienen sus dones y puede que a ellos si les funcione y a mí no.

He aprendido a “escapar”, eso me ha hecho súper bien, desde bloquear a alguien, ignorarlo, suspenderlo de mis contactos frecuentes y hasta actuar algo hipócrita para simplemente tratarlo pero sin importarme su opinión, estilo de vida y hasta la forma de cómo me ve a mí, simplemente NO ME IMPORTA, ha sido sanador, me cura de mi soberbia y evita mi ira y lo peor a expresar mi malestar con la falsa excusa de decir lo que siento, o imponer mi punto de vista y control, simplemente se consiguen en mi un muro impenetrable donde NO ENTRAN, no me afectan y me resbalan, es mejor eso que una confrontación sin sentido. El tiempo lo cura todo, vaya frase que odié por años, pero nada más verdadero que eso.

Dejar que los otros vivan su momento fue mi mayor reto, controlo mis negocios, mi vida, pero no la de los demás; Fue un renacer, dejar de dolerme si otros no me aprobaban o me “valoraban” fue liberador, lo hago por mí, porque me llena con o sin reconocimiento, duermo en paz al menos en ese ámbito.

Mi vida tiene un norte, yo tengo mi plan, SUPER PRIVADO, SUPER MIO, ando y marcho en función de lo que me hace feliz responsablemente, ya no consulto mucho, pido menos permiso, actúo y ya, si me siguen que chévere si no pues ellos tienen también sus cosas que hacer para lograr sus metas.

No puedo ser el papa del mundo y menos su salvador, llevar carajazos es parte de la historia, no puedo yo evitar sus escoyos.

#nodgard
#03-11-2023