HUBERTO SOTO!

Mi amistad con Humberto Soto tiene más historia de lo que la gente sabe o piensa; Corría el año 1986 en Maracaibo – Venezuela, yo era menor de edad y comencé a trabajar en el Grupo Financiero Banco Mara, puntualmente en la Sociedad Financiera de Maracaibo (SOFIMARA), mi jefe era Sven González quien fue mi mentor en informática. Entré como un auxiliar de computación para desempeñar tareas básicas pues no sabía nada de computo, pero tuve esa gran oportunidad de trabajar en una empresa de gran envergadura del estado.

Banco Mara tenía un área centralizada en la sección novedosa (para aquella época) relacionada a la tecnología de PC, cuando lo que gobernaba era los grandes hardware como el AS-400 de IBM, los computadores personales eran como pequeños juguetes a los que pocos apostaban, pero estaban en boga.

Humberto trabajaba en el departamento más importante del banco que coordinaba justo ese rubro, allí estaban solo los mejores, los más jóvenes, los más destacados, lo que pudiéramos llamar la generación de relevo.

Allí estaban amigos (entre muchos) Humberto Soto, Eduardo Rosas (mi profesor), José Boscán y más: Recuerdo con algo de cariño y envidia sana que el banco tenía un comedor donde solíamos ir todos los trabajadores (más de 1000 personas) yo soñaba con poder compartir mi plato con ellos en la misma mesa, pero era realmente inalcanzable porque ellos estaban a otro nivel. Incluso en otra sección del grupo.

Yo todos los días los veía a ellos como mi punto focal hacia donde quería ascender.

Humberto siempre brillante, con su traje impecable y esa personalidad que aun hoy lo caracteriza lleno de seguridad, basado en su preparación técnica y moral que adopté como uno de mis mentores en silencio.

El tiempo pasó, yo me salí el banco para trabajar en otra empresa y tomamos simplemente caminos diferentes, pero un día, gracias a mi amigo EDUARDO ROSAS que ya trabajaba conmigo en mi empresa Premium Soft lo recomendó y volví a reencontrarme con ese personaje, vi a Humberto Soto entrar en mi oficina y era mágico el saber que podía tenerlo en mi staff.

El Aceptó la propuesta, se sumó con su estilo ahora más madurado y orientado a negocios sin perder su vena tecnológica lo cual lo hacía más ideal para acompañarnos.

Llegó a ser Gerente de Operaciones de mi nueva oficina de Maracaibo en el 2009, cuando abrimos la oficina de Panamá (2010), le pedí que nos acompañara por un tiempo corto para apalancarme en su experiencia para impulsar el mercado de este país.

Pues que les cuento que Humberto hoy en el 2023 sigue a mi lado, se quedó, me honra con ser mi socio y el Gerente de Negocios Internacionales, con su visión, con su malicia y astucia, pero sobre todo con su ética y firmeza para ser mi consejero personal y profesional.

A diario nos reunimos en un desayuno que es casi un encuentro religioso donde decidimos todo lo que está pasando y predecimos lo que puede pasar producto de nuestras estrategias en todos los países, con el peso que merece su aporte y opinión. Se ha ganado el respeto y el cariño de todos los colaboradores a nivel internacional, como protagonista de la novela llamada #PremiumSoft.

Humberto es hoy pieza vital, cuando se toma un día o días la empresa siente un vacío, pero siempre está al alcance para todos, desde donde esté.

Lo que resumo es que para mí es un sueño hecho realidad haber podido contar en mi equipo con él, con Sven, con Eduardo, las grandes ligas, es como jugar con un equipo soñado, todos han dejado su huella y su aporte que me han permitido llegar hasta donde estamos luego de 25 años, ellos son Gente #premiumsoft. Y yo eternamente agradecido.

Gracias a todos.

#nodgard
#18-11-2023