SOBRE LA ORACIÓN
Comienzo por decir que respeto absolutamente las creencias religiosas de todo el mundo, desde ateos, hasta aquellos que abrazan su fe adosada a una religión.
Hoy viví una experiencia de reflexión y revisión mental; Todo el tiempo he dado gracias a Dios por irme bien, por mantenerme a salvo de problemas, atribulaciones, carencias, etc.
He pensado siempre (y sigo pensando) que Dios ha sido bueno conmigo, generoso y benevolente, pero mi madre está de visita en Panamá, veo de forma recurrente como ora todos los días, hace un rosario de la coronilla, ve misa por internet, entrega su fe a su rito de oración.
Entonces me puse a pensar … que tal vez, y solo tal vez ..., parte de mi “buena suerte y progreso” viene de esa solicitud que mi mamá hace todos los días a fuerza de su fe en Dios; Me dije “a mis adentros” que parte todo lo bonito de mi vida también viene en buena parte de sus peticiones que hace al padre celestial por todos, todos los días ¿quién más cerca de Dios que ella? Lo hace de forma sincera y genuina, sin un interés más allá que nuestro bienestar, el mío y el de todos los que incluye en ese momento de comunión.
Mi comentario gira en torno al hecho que a veces nos sentimos “bendecidos” sin saber que algunas veces hay “ángeles” detrás de tu día a día que obran y oran de forma silente para que te vaya bien y te exoneren de tristezas y calamidades, nos sentimos merecedores, pero en mi caso mi madre, mi hermana y otras personas me incluyen a mí y a mi familia en sus oraciones bonitas para que mi andar sea bueno.
No desestimemos esas oraciones, esas buenas vibras que otros nos envían sin saberlo, tal vez no todo lo haces tú, puede que vengan de otras personas que también quieren para ti lo mejor, lo cierto es que TODO SUMA, sobre todo si viene de gente que ama desde el alma. Valóralo!
#nodgard
#05-01-2023
En la vida diaria, quienes son disciplinados hacen ejercicios frecuentes día a día, al fin de lograr fortalecer sus músculos y obtener la figura que desean, es una acción que requiere constancia. Desde el punto de vista espiritual, el Orar es un ejercicio diario que fortalece la fe y tu relación con Dios y tonifica el alma. Ciertamente estamos destinados a orar para no flaquear y caer en las tentaciones de hacer cosas o de decir algo que consciente o no puedan ofender a Dios. Y esto nos lleva a orar por otras personas independientemente de su relación con nosotros. Este Ejército Orante son todos los que interceder por otros pues somo todos llamados a orar por todos siempre con Fe. San Pío de Pietrelcina decía Ora, ten Fe y Espera. Si Jesús, nuestro Señor lo hacia constantemente y sin desfallecer, es un buen ejemplo a seguir.
ResponderEliminar