HUYENDO (de ti)

 

Es una actitud cómoda el huir de los problemas, históricamente solemos ignorar las situaciones complejas, queremos salir corriendo despavoridamente de ellos, sobre todo si sentimos que no son nuestro ámbito, que no son nuestro lio.

 

Pero algunas veces hace falta revisar hasta donde estamos dejando detrás temas inconclusos, donde en el fondo si tenemos protagonismo, esa huida cobarde deja cabos sueltos que arrastramos en nuestro inconsciente de forma irresponsable y lo peor es que se hacen grandes como una bola de nieve o paja y se hacen presentes en algún momento, mucho mas grandes de lo que fueron por no ser atendidos en su momento.

 

Algunas personas especialistas lo llaman traumas del pasado y resulta que tienen todo el vigor de lo antes expuesto.

 

El tiempo me ha enseñado que no es sano olvidar u obviar esas situaciones, debemos tener el coraje de asumirlos y resolver esos pendientes. Incluso buscar ayuda y hasta compartir esa situación con gente de nuestro entorno y/o especialistas que nos ayuden a desatar los nudos.

 

Yo por ejemplo a veces intento darle la espalda o dejarlos para después y me persiguen, eso me ha dado la luz que debemos ser valientes y trabajar cada cosa para “matarlos cuando son chiquitos” antes que crezcan.

 

La invitación es a NO HUIR, si no resolver, para que puedas avanzar limpio, toca fondo, pasarás de seguro algún trago amargo, pero te toca.

 

#Nodgard
#07-07-2023

 



Comentarios

Entradas populares de este blog