LA TAPA DEL PIANO

Son muchas las veces que cuando viajo a Venezuela, donde tengo el privilegio de tener un piano de media cola MIO y lo destapo, muevo esta tapa y coloco su soporte para que me hable, es casi sistemático, llego y voy directo a destaparlo, a quitar la sábana que lo cubre (que le puso mi señora madre), es como la misma sensación que uno siente cuando abre un regalo de navidad, lo vivo y revivo en cada viaje.

Amo destapar ese negro (así lo llamo), ver sus teclas intactas para mí, como esperándome, invierto en su afinación antes de mi llegada, llego a Venezuela y me encuentro con ese objeto que ocupa gran parte de la geografía de mi sala-comedor, está allí, casi no lo disfruté porque me vine a Panamá apenas a meses de comprarlo, de vivir la travesía de subirlo a un séptimo piso, y armarlo, llegó desde Caracas para mí, sin saber ni reconocer su grandeza, inevitablemente llegó desafinado, desarmonizado, pero tuve muchos aliados que le dieron forma.

Llego ese “mueble” para algunos, ocupa aun, mucho espacio de mi departamento de SAINT THOMAS, lo armaron, lo pusieron allí, luego grandes maestros le dieron vida, lo restauraron, lo afinaron y lo hicieron parte de mi vida, de mi alma, de mi versión más bonita como músico.

Sigo pisando tierra venezolana sabiendo que me espera, allí está mi negro, un piano steinway and songs, más de lo que soñé, más de lo que merece un aficionado como yo, pero lo tengo, lo gozo y vivo.

Duerme en mi departamento de Venezuela, todos los días está allí, cuidando mis vivencias, las que incluso no puedo experimentar yo. Pasa el tiempo y él está allí, bello, brillante, con su silla donde suelo sentarme a tocarlo, donde mis manos apoyan y desdibujan la vida, sin política, sin economía, solo él y yo sin egos ni apegos lo amo.

Allí pues dejo la vida, comulgo en cada viaje ponerlo al tanto de lo que viví desde la última vez hasta el hoy, le digo “ya vengo” y entonces lo alimento, ese es mi piano, bonito, muy mío, solo lo toco yo, con absoluto amor y entrega, sin técnica, sin críticas, hago mis canciones, es como un encuentro único donde me reconoce y yo a él, solo los músicos de alma lo podrán entender.

En fin, me gozo ese encuentro bonito, musical, espiritual y más. (sin materialismo, solo amor y reconocimiento a un divino instrumento musical)

#nodgard
#30-09-2022


 

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