¿Por qué a mí?

¿Te has preguntado alguna vez eso? Creo que todos en algún momento difícil nos hemos hecho ese cuestionamiento, nos revela una situación donde nos sentimos en desventaja con respecto al mundo, pensamos y sentimos que somos el epicentro de la desgracia, como si fuésemos un objetivo la vida para jodernos. Muchas veces sentimos que es inmerecido, no tenemos explicación a esa situación, solemos hachárselo al karma, a nuestras acciones presentes o incluso a las vidas pasadas, otras veces mejor decimos optimistamente que “por algo pasa” para prepararnos para algo mejor.

Sin saberlo, cuando decimos esto, estamos siendo algo egoístas, auto-victimizados, porque estamos intrincadamente deseando que a otro le pase la adversidad que estamos viviendo, por ello nos cuestionamos así.

Pero también pasa cuando te va bien, entonces pregúntate lo mismo cuando todo te salga chévere ¿Por qué soy bendecido con ésta experiencia? Para ser justos, desearles a otros cosas buenas no estaría mal.

Es verdad, para lo bueno y lo malo nos pasan cosas porque lo merecemos o porque lo atraemos, lo cierto (a mi juicio) es que todo forma parte del vivir, de lo que nos pasa porque sí, entonces nos toca aplicar un poquito de análisis para capitazarlo como experiencia y aprendizaje para seguir repitiéndolo (si es bueno) o evitarlo (si es malo).

Resumen ¿Por qué a mí? Porque te toca, por algo y revísate, simplemente vívelo y encuádralo en lo que tu análisis te pasa y que te deja. No dejes de preguntarte ¿para qué me pasa, que me deja, que debo aprender? Y con mucha conciencia tómalo.

#nodgard
#14-08-2022