MIS 50 y Pico
Tener 53 años (en eso estoy) es algo que vivo, me ha servido de mucho conectarme con mi historia personal, con mis logros y con mis ensayos, digo “ensayos” para evadir la palabra fracasos o errores, ha sido toda una experiencia mágica, a veces me preocupo cuando me miro al espejo y no veo al mismo tipo joven de antes, pero no me castigo con las arrugas si no que lo valoro como mis vivencias y camino recorrido.
Con mucha frecuencia hablo con amigos y conocidos que alegan con absoluta preocupación no haber logrado sus metas, sus sueños, me siento realmente privilegiado por haberme trazado mis mapas del tesoro y haberlos alcanzado una y otra vez.
Es bonito cuando eso te pasa en la vida, tú te planteas lograr algo o muchas cosas y lo logras, me siento realizado, pues Dios ha sido muy generoso conmigo, me ha dado a manos llenas oportunidades que he trabajado duro para convertirlas en realidad y honrar su plan mágico para mí.
He sido prospero, sano, he tenido una familia bonita, he apoyado a tanta gente en mis empresas que hoy veo que son independientes y sigue llevando un poquito de mi aporte a su vida y a definir su camino de cómo ganarse la vida, no todo ha sido color de rosas, en el camino mucha gente se ha bajado de los vagones de mi tren, era su momento, nadie dijo que sería eterno, tienen su propia luz y la aprovechan, solo me queda en el alma el consuelo que yo estuve allí y tal vez escribí un capítulo breve en su vida, lo agradezcan, lo reconozcan o no, pero hice mi parte, el agradecimiento es algo muy personal, muy particular, arriba hay un Dios y el juzgará cuanto puse, aporté o no.
Hoy siento que completé un ciclo, muy largo y ganador, ahora me trazo nuevas metas, nuevos retos, que rico es que a mi edad me re plantee todo para un nuevo camino, donde ésta vez ya con mis hijos grandes y que ahora son mis socios, pueda crear cosas nuevas, no me rindo en soñar, es la base de todos mis planes, si hoy pudiera definirme diría sin reserva que soy un soñador empedernido, me re construyo, me desdibujo y me creo un nuevo ser, para los próximos 30 años, allí estoy en eso trabajo todos los días en silencio, sin contarlo mucho, solo me lo guardo y todos los días sumo y sumo más líneas a mi plan, porque voy a seguir siendo un hombre que hoy me siento bendecido, con el honor en alto, con mi frente (que es basta) en arrumbado al nuevo camino, vienen cosas grandes, no paro de crear cosas nuevas y lo mejor rodearme de gente bonita que me apoya de forma incondicional, SOLO NO PUEDO, por eso sigo caminando con ellos de la mano, Dios los bendices, NO SOY YO, son ellos los que impulsan y me motivan a avanzar. Lo haremos a lo grande. Más allá de lo económico, me refiero a lo profesional, espiritual, sentimental, emocional y mental.
Vamos a seguir, que bonito tener vida para decir “VAMOS A SEGUIR”
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