APARIENCIAS
Cada cual tiene consigo una alta cuota de EGO, eso que suele movernos para lograr ciertas cosas que nos
suelen motivar a superarnos, otras veces nos fabrica un mundo donde somos
relativamente protagonistas, a veces nos sentimos más importantes que otros,
ello nos da según no se quien prioridad para asumir poses o ventajas
desde lo cotidiano, como “hacernos
respetar” hasta reclamar un rol ante eventos tan simples como ¿Por qué se va a “colar” determinada persona”? y más. ¿Cuántas veces hemos escuchado (incluso de nuestra propia voz) tú
no sabes quién soy yo? Como si fuera algo tácito donde exigimos que nos den un puesto
en determinada situación, como si fuésemos merecedores de un nivel de
autoridad, supremacía o protagonismo.
Eso es EGO, cuando ocurre es porque
ese EGO nos gobierna, él manda, maneja el coche de nuestra vida y nos
deteriora socialmente, sin saberlo nos excluye de la comunidad o la manada
donde comúnmente habitamos, porque nos creemos más que nadie. Estamos por
encima de todo concepto, juicio y derecho.
Pero hoy trato el tema de las apariencias, que está ligado a esta sensación
o percepción, luchamos contra la sociedad en una competencia absurda (a mi juicio) por ver quien tiene más,
quien puede comprar más, de más marca, de mayor costo, más caro, es una
necesidad que nace de ese EGO por buscar herramientas o sostenes que nos
guinden al cielo donde los demás nos envidien o nos admiren por lo que
si somos capaces de tener, olvidando que eso no es lo relevante, pero para aquellos que
desesperadamente requieren ese reconocimiento es verdaderamente importante
desde incluso su psiquis.
Esas personas viven un mundo paralelo, aclaro que algunas personas
genuinamente tienen “CON QUE” pero necesitan restregárselo a otros para recordarles
que ellos sí y tu no.
Triste escenario, pero lo vivimos cotidianamente a diario, desde mostrar su
poder compra de bienes y servicios, el carro que tienen, los lugares donde
comen, los viajes que hacen, los “amigos
y/o contactos” que los rodean, la cantidad de seguidores, los “LIKES EN VIDEOS Y POST” y más. Es todo un necesario
placer que experimentan al menos cavar a otros con tal de escalar
algunos pasos para sobresalir en su batalla interna con su EGO.
Esto, mis queridos lectores, solo refleja una falta de humildad, un déficit de auto estima, la necesidad de
reconocimiento, intentan llenar el vacío de su alma con sus “pretensiones” o aquello que llámanos apariencia. Un mundo irreal donde ellos
suelen creerse el cuento que son “Protagonistas”, en
más del 90% de los casos son el hazme reír de justo quienes lo siguen, terminan
por ser rechazados y pierden amistades con frecuencia bajo el pendejo pretexto “es que me tienen envidia”, “ellos se lo pierden”, “no era para mí”,
pero realmente o en REALIDAD es que
no te soportan. ANALIZALO (Si puedes)
Es casi un cliché donde la gente dice “allí viene fulano, es presumido y no lo soportamos, pero
vamos a seguirle la corriente”, eso
en el fondo es lo que piensa tu entorno, sépalo amigo narcisista. NO
LE INTERESAS A NADIE.
No soy quien para decirte
que hacer o cómo actuar,
solo te revelo este crudo diagnostico basado en mi percepción y experiencia, a
veces es mejor que te subestimen, o mejor que tus logros sean tan evidentes que
hablen por ti SIN PROPGANDA, sin la ropa de marca o el reloj caro, sin
el ultimo teléfono o el carro más costo, todo eso va y viene, pero intenta venderte
y calar por ti mismo, al desnudo, por tus valores, tu experiencia, tu forma de
ser y obrar, es más desgastante que la caratula del disco o el “empaque” pero deja que consuman por
base o esencia, es mejor.
Aparentar es desgastante, como una máscara dura de sostener y lo
peor es cuando se cae te abandonan porque no encontraron base buena para seguir
a tu lado.
Va desde la relación personal, familiar, de pareja y de amigos., Analízate
y se genuino, sobre todo contigo mismo, se más persona, se mas normalito y guárdate
tus medallas, has que brillen tanto que los demás orgánicamente las noten y te
admiren si es eso lo quieres y te alimenta.
#Nodgard
#28-02-2024
Digno de leer y de analizar
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